
RESERVA TINAJANI

Tinajani: un paisaje vivo en proceso de conservación
La Reserva Tinajani se encuentra en proceso de ser declarado Paisaje Cultural y Área de Conservación de Recursos Naturales mediante la Ordenanza Regional N.º 023-2018-GR, con el propósito de resguardar su valor ambiental y arqueológico. Actualmente se vienen realizando labores de restauración, señalización, limpieza y resembrado de pastizales, orientadas a ordenar la visita, facilitar el acceso y proteger la integridad del paisaje.
El Área de Conservación, declarado Patrimonio Cultural de la Nación por la Resolución Directoral Nacional N.º 296/INC, es un sitio arqueológico protegido donde no se permite el ingreso. Esta medida busca resguardar su valor cultural y ambiental.
Para quienes deseen conocer el lugar, se mantiene un acceso peatonal controlado hacia las formaciones rocosas más emblemáticas, disponible en horarios establecidos y diseñado para minimizar el impacto ambiental.
La zona de alojamiento y áreas de investigación cuentan con acceso restringido y visitas previa reserva, en coherencia con los objetivos de conservación que guían la gestión de este paisaje único del altiplano puneño.


Información para Visitantes
Horarios
De lunes a domingo, de 8am a 5pm, en las zonas públicas.
Recomendaciones
Respetar los senderos y señalización de rutas. No dejar residuos, cuidar la flora y fauna, y honrar el carácter sagrado del lugar.

Cañón de Tinajani, Alto Angara
Turismo Responsable
Visitar Tinajani significa sumarse al compromiso de protegerlo. El proyecto contempla tres zonas de manejo, diseñadas para equilibrar la experiencia del visitante con la conservación del entorno:
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Sector Protegido: área de valor arqueológico bajo resguardo del Ministerio de Cultura, sin acceso al público.
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Zona Restringida: donde funcionará un hospedaje de bajo impacto. El ingreso será posible solo con reserva previa, para asegurar un turismo regulado.
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Zona Pública: habilitada para caminatas y exploración a pie, con acceso peatonal controlado y normas específicas para preservar la flora, fauna y el paisaje.

Hacia un Área de Conservación Privada
Santuario Natural y Cultural del Altiplano
El Cañón de Tinajani, en Ayaviri – Puno, es un escenario único del altiplano peruano. Sus formaciones rocosas monumentales, valles y quebradas han sido, desde tiempos ancestrales, lugar de encuentro espiritual, cultural y natural.
Tinajani avanza hacia convertirse en un Área de Conservación Privada, bajo un modelo que combine protección patrimonial y turismo responsable. La visión es que este entorno se resguarde oficialmente y al mismo tiempo se abra al visitante con una experiencia auténtica y respetuosa.



Geografía y Naturaleza

Entre los Andes del sur, Tinajani despliega un paisaje esculpido por millones de años de historia geológica. Sus rocas rojizas, modeladas por el viento y el agua, parecen figuras humanas y animales que emergen del altiplano.
A más de 3,900 m.s.n.m., su ecosistema altoandino alberga flora nativa como la puya de Raimondi, la quinua y la papa, además de aves y camélidos andinos. Proteger este entorno significa resguardar la vida y el equilibrio natural del altiplano.
Educación y Conservación
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El Proyecto Tinajani busca que este cañón se convierta en un aula abierta donde aprender de la naturaleza y la cultura viva. La visión de futuro es consolidarlo como un Área de Conservación Privada, integrando esfuerzos comunitarios, familiares y empresariales para asegurar que las próximas generaciones puedan seguir disfrutando y comprendiendo este lugar único.
Aquí la conservación no se opone al turismo: se transforma en una oportunidad de educación, respeto y sostenibilidad.
Patrimonio Cultural y Arqueológico

Tinajani no solo cautiva por su paisaje: también guarda huellas de antiguas civilizaciones. Chullpas, petroglifos y caminos rituales revelan la presencia prehispánica, reconocida oficialmente como zona arqueológica protegida por el Ministerio de Cultura.
En sus quebradas aún resuenan las leyendas transmitidas de generación en generación, donde la piedra y el mito se entrelazan, recordándonos que este territorio es también un espacio sagrado de la cosmovisión andina.